CEMEX España Operaciones se incorpora al Pacto por una Economía Circular. Se trata de un compromiso que tiene como objeto implicar y comprometer a los principales agentes económicos y sociales en la transición hacia nuevo modelo económico basado en el mantenimiento de los materiales en la economía el mayor tiempo posible, reduciendo así al mínimo la generación de residuos.
CEMEX en España viene participando de la economía circular desde hace más de una década, cuando se empezaron a implantar en sus procesos de fabricación del cemento prácticas habituales de países de nuestro entorno (Alemania, Reino Unido, Holanda, etc..). Este camino se inició con la sustitución de materias primas y combustibles tradicionales –recursos naturales no renovables- por otros procedentes de diferentes residuos. En el primer caso, se empezó a utilizar como aditivo o material residuos procedentes de fundición, cenizas, lodos de papelera, arenas de fundición, escorias o material de derribo. En el segundo, se incorporó a un proceso, imparable en los países medioambientalmente más avanzados, al utilizar nuevos combustibles nacidos a partir de residuos, que hasta ese momento no tenían utilidad. En ambos casos estos residuos tenían como fin último el vertedero.
Jesús de la Calle, director de Innovación, Calidad y Sostenibilidad de la compañía, destaca que "la economía circular el gran compromiso de CEMEX, que lleva años aprovechando los recursos, ahorrando en materias primas y combustibles fósiles y eliminando estos materiales de los vertederos. Todo ello sin disminuir la calidad del producto, con todas las garantías para la seguridad y salud de las personas y con la ventaja de que se reducen las emisiones de los procesos de fabricación a la atmósfera".
Otras áreas del negocio, como la extracción, también se articula bajo los principios de la economía circular: se explota la cantera y posteriormente se recupera devolviendo los terrenos al entorno en igual o mejores condiciones o restaurándolos para otros usos económicos o sociales como explotaciones agrícolas o desarrollando Planes de Acción para la recuperación de la Biodiversidad (PAB).
Sumarse a este Pacto, que supone un reto medioambiental, económico, tecnológico, social y de mentalidad de primer orden. Según explica el director de Sostenibilidad de CEMEX “requiere del esfuerzo de todos para que no se desperdicie ningún recurso, se aproveche todo lo que entra en la cadena económica, se le dé a los materiales todas las vidas posibles y, antes de tener que ser depositado en los vertederos y como último recurso, se extraiga la energía que contienen, una práctica que viene realizando CEMEX y que dicta la Comisión Europea en su hoja de ruta Hacia una Europa eficiente en el uso de recursos en la “Estrategia Europea de Crecimiento 2020”.