El pasado 13 de febrero se ha producido la adaptación del Marcado CE y de los certificados AENOR a la nueva norma europea de Cementos Comunes para la mayoría de los cementos.
La adaptación a la norma europea UNE-EN 197-1:2011 “Cementos comunes” y a la norma nacional UNE 80303-1:2013 “Cementos resistentes a los sulfatos” tiene carácter obligatorio a partir del 1 de julio de 2013.
Aparecen en el mercado cementos con característica sulforesistente recogidos como cementos comunes (CEM) resistentes a los sulfatos (SR). Estos cementos junto con los tradicionales que pasan a designarse con la característica SRC, son exigidos por la EHE-08 en el caso de hormigones expuestos a determinados ambientes que contengan una elevada concentración de iones sulfato.
La novedad reside en la inclusión de un apartado específico dedicado a los cementos resistentes a los sulfatos en la norma europea UNE-EN 197-1:2011 y al cambio en la designación de los cementos según norma nacional, UNE 80303-1:2013. Su utilización se recomienda en los hormigones expuestos a los ambientes que contengan una elevada concentración de iones sulfato.
En España la Instrucción EHE-08 exige este tipo de cementos (característica SR y SRC) en ambientes con contenido superiores a 3000 mg/kg en el caso de suelos o a 600 mg/l en el caso de aguas, excepto cuando se trate de agua de mar o el contenido en cloruros sea superior a 5000 mg/l, en este último caso la característica adicional podrá ser la resistente a agua de mar (MR).