El Club Español de la Industria, Tecnología y Minería (ITM) y el CSIC organizaron una jornada con el objetivo de profundizar en la importancia de la ciencia como instrumento clave de la sociedad del futuro. En este sentido, la Agrupación de Fabricantes de Cemento de España (Oficemen) ha querido participar como patrocinador en la iniciativa, ya que el sector cementero está apostando muy fuerte por la innovación y la tecnología con el objetivo de conseguir una industria sostenible y cada vez más eficaz.
El presidente del Club ITM, José Rosón, destacó que la ciencia es uno de los principales recursos de la economía. Así, afirmó que “ciencia, tecnología, innovación y empresa forman un todo armónico y en claves de competitividad no se puede prescindir de ninguno”.
La conferencia inaugural, a cargo del presidente del CSIC, Carlos Martínez, versó sobre “Los retos de la ciencia en el siglo XXI”. Durante la misma, Carlos Martínez abogó por que en España “se explore lo desconocido, se abran fronteras y se lideren proyectos”. Igualmente, incidió en que “la ciencia es un proceso inmerso en una sociedad cada vez más demandante de la misma”. Al respecto, añadió que “este proceso supone una interacción entre varios partners como son el gobierno, la universidad, la industria y la sociedad”. En conclusión, el presidente del CSIC apostaba por la “ciencia del riesgo” como la herramienta del futuro para nuestra sociedad.
Energía
Durante la jornada se abordaron temas como la biología molecular, las tecnologías biómicas, tecnologías cuánticas o valor estratégico del conocimiento científico, entre otros. Además, una de las ponencias, a cargo del director general adjunto del CIEMAT, Cayetano López, profundizó en una cuestión de candente actualidad como la energía y la sostenibilidad.
Cayetano López aseguró que “es necesario, por un lado, disminuir la dependencia de los combustibles fósiles y, por otro, utilizarlos de modo que emitan menos gases de efecto invernadero”. No obstante, aclaró que en 20 años el petróleo se encarecerá y se irá agotando, por lo que existe una acuciante necesidad de apostar por energías renovables. En este sentido, señaló que “aunque algunos países apuestan por el gas natural no se debe olvidar que es limitado, es una especie de parche a corto plazo”.
El director general adjunto del CIEMAT apostó por diversificar el menú energético, ahorrar energía y disminuir el peso relativo de los combustibles fósiles. Unas cuestiones en las que la industria cementera ya está actuando a través de la utilización de residuos como combustibles alternativos, al tiempo que pone un especial énfasis en la reducción de las emisiones de CO2 a la atmósfera. En este sentido, cabe destacar que el sector español es cinco puntos más eficiente que la media de la Unión Europea y se sitúa en la cabeza del ranking de industrias cementeras en eficiencia energética, junto a Japón y Corea.