La directora general de Calidad Ambiental, Maria Comellas, y el presidente de Ciment Català, Àngel Cercós, han firmado el 26 de noviembre un acuerdo voluntario con el propósito de prevenir y controlar la contaminación de la industria cementera catalana. El convenio nace con la voluntad de promover la mejora en el comportamiento ambiental de las actividades del sector, basándose en la aplicación progresiva de las mejores técnicas disponibles (MTD) y la valorización de residuos en las plantas. Las partes firmantes estiman que de este modo la tasa de sustitución de combustibles fósiles prevista evitará la emisión de un mínimo de 1 millón de toneladas de CO2 hasta 2015
Los objetivos del acuerdo se centran en compatibilizar el crecimiento económico de las empresas con el respeto por el medio ambiente y en colaborar con estudios técnicos y económicos acerca de la interrelación entre industria cementera y medio ambiente. De igual modo se hará pública la información relativa a las emisiones a la atmósfera de las plantas de las empresas adheridas. Por otra parte se facilitará a estas compañías las desgravaciones fiscales por inversiones medioambientales a las que tengan derecho, de acuerdo con la normativa vigente.
Las cementeras también se comprometen a reducir las emisiones de partículas, óxidos de nitrógeno (NOX) y dióxido de azufre (SO2), además de cloruro de hidrogeno (HCl), fluoruro de hidrogeno (HF), dioxinas, furanos y metales. Los niveles quedarán fijados por debajo de los valores de emisión asociados a la utilización de las mejores técnicas disponibles.
Así el sector actuará en la prevención, reducción y control de la contaminación atmosférica a través de acciones concretas. Para reducir las partículas originadas en chimeneas, renovará y/o instalará sistemas de desempolvado, y aplicará sistemas de control. Del mismo modo, reducirá los NOX y el SO2. Las partículas procedentes de operaciones de almacenaje, manipulación y transporte de materiales se minimizarán, por ejemplo, con el cerramiento de instalaciones, la colocación de pantallas o el acondicionamiento de las pilas de material.
Este es el segundo acuerdo que subscriben las dos partes, tras el convenio de colaboración sellado el 1 de marzo de 2002, vigente hasta la actualidad. La Comisión de Seguimiento del convenio, integrada por representantes del Departamento de Medio Ambiente y Vivienda y de Ciment Català y las fábricas adheridas, consideró necesario elaborar un nuevo convenio de colaboración con objetivos más alineados con el nuevo marco legal, teniendo en cuenta que, en mayo de 2010, la Comisión Europea adoptó un nuevo documento de referencia sobre las mejores técnicas disponibles (MTD) aplicables al sector.