En la última reunión de la Comisión de Sostenibilidad de Cemex Castillejo (Yepes) integrada por diferentes asociaciones de Toledo, representantes de los ayuntamientos de las localidades vecinas y los sindicatos UGT y CC.OO., se dieron a conocer los datos ambientales de emisiones de la fábrica de cemento manchega durante 2010. En el encuentro se explicó que en el conjunto del ejercicio se habían conseguido dejar de emitir 21.514 toneladas de CO2, lo que equivaldría a las emisiones producidas por 8.600 coches al año circulando una media de 15.000 kilómetros.
Este balance tan positivo fue posible gracias a las importantes inversiones que se han realizado en la planta -que este año celebra su centenario-, en materia medioambiental. Más concretamente las destinadas a la preparación de las instalaciones para permitir la utilización de combustibles alternativos, principalmente plásticos.
Así, la fábrica alcanzó en 2010 un porcentaje de sustitución medio de combustibles alternativos del 37,25%, lo que supuso un incremento en relación al 2009 del 24,8%. Cemex Castillejo es uno de los líderes del Grupo Cemex a nivel internacional, en sustitución de combustibles derivados del petróleo por otros procedentes de residuos.
Entre las mejoras que se han llevado a cabo en la fábrica en los últimos meses en materia medioambiental destaca la instalación de un nuevo quemador en el horno 5, más eficiente, con una inversión de 273.300€.
Por otro lado, la Comisión también fue informada de todos los parámetros analizados durante 2010 (ruido, gestión de residuos, vertidos e inmisión). En ningún caso se superaron los límites marcados por la legislación vigente, constatándose nuevamente que el porcentaje en la utilización de combustibles alternativos no influye negativamente en los resultados de las emisiones.
Trituradora de Plásticos
Entre las últimas inversiones realizadas en la cementera toledana destaca la nueva trituradora de plásticos. Esta permite, con las últimas tecnologías, procesar la fracción resto (cuyo destino sería alternativamente el vertedero) de los plásticos que llegan hasta la fábrica desde los gestores autorizados, garantizando un alto rendimiento en la trituración y uniformidad en el tamaño –lo que aporta estabilidad a los hornos de cemento en cuanto a combustión y por tanto a las emisiones derivadas, y evita su arrojo en vertedero-, utilizándolo la planta como combustible alternativo.