Diversos expertos participaron el 26 de noviembre en el acto sobre `Gestión sostenible del agua´ en el marco de la 1ª Jornada de la Cátedra Holcim de Desarrollo Sostenible del curso 2010-2011. El objetivo de este evento es promover el conocimiento de la realidad del agua y promover el debate, analizando los factores que inciden en una gestión eficiente que permita su utilización en la agricultura, en la actividad industrial, en la generación de electricidad o en la producción de numerosos bienes y servicios que sustentan el actual modelo económico.
El encargado de abrir la sesión fue el director gerente de la Agencia Andaluza del Agua de la Consejería de Medio Ambiente, Juan Paniagua Díaz, quien remarcó la importancia de la nueva Ley de Aguas andaluza, en la que se pretende como principal objetivo la “indiscutible necesidad de protección de los recursos hídricos” para conseguir un verdadero desarrollo socioeconómico de Andalucía.
Para Paniagua, el desarrollo de la nueva Ley vendrá a garantizar la gestión sostenible del agua en Andalucía, lo que redundará en el progreso económico de la región y, por tanto, en la mejora de la calidad de vida de los andaluces. También apeló a la implicación de la ciudadanía en este nuevo modelo de gestión, fomentando la participación de los agentes sociales en la toma de decisiones, haciendo que los ciudadanos “adquieran la visión de los ríos como parte de su patrimonio, como una riqueza más de su entorno más cercano y como una oportunidad de desarrollo”.
La siguiente intervención fue la del Catedrático de Geografía Leandro del Moral, para el que la “sostenibilidad” de los recursos hídricos pasa por aplicar los principios en los que se basa la legislación europea: prioridad de la conservación o recuperación de los ecosistemas acuáticos, responsabilidad de los usuarios (que deben darse cuenta de que el agua es un patrimonio de gran valor cuyos costes de utilización han de ser sufragados), y participación social activa en las decisiones sobre el agua; todo ello, comprendiendo los sentimientos de memoria colectiva que rodean al agua, así como las interrelaciones entre ésta y los procesos de desarrollo territorial.
El desarrollo de la nueva Ley andaluza del Agua centró la intervención de la directora general de Planificación y Participación de la Agencia Andaluza del Agua, Isabel Comas, quien destacó la puesta en marcha de un plan de depuración que conseguirá el buen estado de todas las masas de agua andaluzas en el horizonte 2015, gracias a la entrada en vigor del nuevo texto legislativo. Un plan de depuración en el que se han declarado 300 obras de infraestructuras de Interés de la Comunidad, que generarán más de 28.000 puestos de trabajo gracias a una inversión superior a los 1.700 millones de euros.
Infraestructuras y sostenibilidad
Por su parte el presidente de la Comisión de Medio Ambiente de la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA), Fernando Reyero, señaló que la escasez de los recursos hídricos hace necesaria una nueva cultura del agua que abogue por una política que garantice más equidad, eficacia y sostenibilidad, aprovechando las mejores tecnologías disponibles y conforme a una buena gestión y conservación de los ecosistemas asociados al agua.
Finalmente, el consejero delegado de Emasesa, Manuel Marchena, remarcó que la gestión sostenible del ciclo integral del agua tiene un doble enfoque: empresarial y medioambiental. Desde el punto de vista empresarial se ha de tomar como base el equilibrio presupuestario, aplicando una estructura tarifaria progresiva que refleje el coste real del servicio, la inversión continua en las instalaciones (que cifró en más de 50 millones de euros anuales) y la adecuada gestión de Recursos Humanos.
Por lo que respecta al aspecto ambiental, debe tenerse en cuenta la gestión eficiente de la energía para lograr la autosuficiencia en 2013 mediante las minicentrales hidráulicas, la cogeneración, las plantas solares fotovoltaicas o las auditorías para reducir los consumos.