Uno de los elementos de debate fue la necesidad de avanzar en la adecuación de las infraestructuras portuarias al uso y a la específica actividad desarrollada en los puertos. En este sentido, el director del Laboratorio Central de Estructuras y Materiales del Cedex, José Manuel Gálligo, pueso de manifiesto la importancia de las investigaciones desarrolladas para conseguir materiales con mayor durabilidad y adaptados a las características del medio. Por su parte, el jefe del Área de Cementos y Morteros de IECA, Miguel Ángel Sanjuán, hizo un recorrido por los diferentes usos de los hormigones y el cemento en ambientes marinos.

Las especiales condiciones de trabajo y exposición a la agresividad del agua del mar en las zonas portuarias requieren de infraestructuras sólidas y durables, por lo que el hormigón siempre ha sido el material preferido por ingenieros y diseñadores. El cemento es una materia prima esencial que, desde principios del siglo XX, ha sido objeto de estudio para evitar el deterioro acelerado de los hormigones bajo la influencia del agua del mar. Las altas concentraciones de sulfatos y cloruros en las zonas de contacto y/o bajo la influencia del mar afectan directamente a las estructuras de hormigón.

En este sentido, el desgaste producido en las infraestructuras portuarias por la acción mecánica o química del agua y la actividad desarrollada sobre las mismas, requiere del uso de elementos constructivos que presenten un mejor rendimiento. 

Investigaciones realizadas han concluido que los nuevos materiales han de tener alta resistencia a los sulfatos y cloruros, elementos muy concentrados en ambientes marinos, ya que al penetrar éstos por la superficie de los hormigones marinos, afectan a su resistencia y durabilidad.

Desde hace unos años, al amparo del convenio firmado entre la Autoridad Portuaria y FYM-Italcementi Group, se vienen realizando pruebas por parte de la empresa cementera para desarrollar nuevos productos más sostenibles que superen las prestaciones que habitualmente ofrece el mercado. Fruto de esta investigación, este mismo año, se ha iniciado la comercialización de un nuevo cemento especialmente recomendado para la fabricación de hormigones en ambiente marino, que mejora la resistencia y durabilidad de los elementos construidos, y permite optimizar los espesores de recubrimiento de las armaduras conforme a las máximas garantías exigidas en la normativa vigente.

El cemento i.idro DURA 42,5 R/MR es una novedad en el mercado español y complementa la gama i.idro que ofrece la empresa para la construcción de obras donde se requieran condiciones especiales de durabilidad en ambiente marino. Este cemento marino también presenta grandes avances en el compromiso de sostenibilidad de la compañía, pues permite reutilizar un alto porcentaje de subproductos de otras industrias, que en otro caso serían depositadas como residuos.

El objetivo es conseguir infraestructuras con un mejor comportamiento en el tiempo, que requieran menor inversión en mantenimiento y mejoren la rentabilidad de las obras portuarias.