La cuenta atrás para la nueva Ciudad de la Justicia de Alicante ya ha empezado. Las obras de cimentación para la construcción del nuevo complejo judicial alicantino han comenzado y Cemex suministrará un total de 30.000 m3 de hormigón, fabricado con cemento procedente de su fábrica de Alicante.
El proyecto, que llevará el nombre de ‘Rafael Altamira’, está promovido por la Generalitat Valenciana y agrupará hasta 10 sedes judiciales dispersas por la capital. Las nuevas instalaciones se ubicarán sobre una parcela de 5.500 m2 y contarán con un edificio de 7 plantas y dos sótanos con un total de 47.000 m2 construidos.
“Para Cemex es un orgullo participar en infraestructuras como esta, con un impacto positivo para los vecinos de Alicante. Los hormigones que Cemex va a aportar al proyecto se fabrican con cementos producidos en nuestra factoría de Alicante. Esta planta está situada a escasos 10 Km de la ubicación del proyecto y, por tanto, tienen una huella de CO₂ relacionada con el transporte muy pequeña, lo que los hace sin duda más sostenibles”. comenta José Antonio Román, Gerente comercial de Cemex en Levante.
El suministro para este proyecto está totalmente alineado con los objetivos del programa Futuro en Acción de Cemex, la estrategia de sostenibilidad y descarbonización de la compañía, lanzada en 2020, a través del cual ha logrado un progreso récord en la reducción de la huella de carbono de sus operaciones y de sus productos. La meta es lograr la neutralidad de carbono en 2050 y contribuir mediante la oferta de productos más sostenibles a la descarbonización del sector de la construcción.
Actualmente, la compañía trabaja en multitud de iniciativas para descarbonizar su negocio y un claro ejemplo de ello son los proyectos que se están desarrollando en la planta de Alicante. Recientemente, esta fábrica ha recibido el apoyo de la Comisión Europea, en el marco de la convocatoria ‘Innovation Fund Small Scale 2021’, para el proyecto CLYNGAS, una iniciativa que permitirá a Cemex sustituir parte del combustible utilizado para la fabricación de clínker por un gas de alto valor, obtenido mediante el proceso de gasificación de residuos y subproductos de otras industrias. Otro de los proyectos, actualmente en ejecución, es Molentis, un nuevo molino terciario que entrará en funcionamiento en 2025. La instalación ha sido financiada por los fondos Next Generation y que contribuirá a reducir considerablemente su huella de carbono de la planta. Existen otros proyectos en marcha o en estudio relacionados con el uso del hidrógeno, la captura de carbono o la instalación de placas solares, entre otros, que contribuirán a alcanzar los objetivos de descarbonización de la planta y de la compañía.
