La multinacional Cemex ha puesto en marcha el “Plan Horizonte” para adaptar su estructura productiva a la actual situación del sector cementero español, castigado por el continuo descenso de la demanda, el aumento de los costes y las malas expectativas. El nuevo plan se basa en la excelencia operativa, la eficiencia en costes y el mantenimiento del liderazgo en sus mercados.

Desde 2007 el consumo nacional de cemento y sus derivados viene recortándose de forma alarmante año tras año. Comparando el consumo de 2007 con la mejor estimación para el 2012, que alcanza tan sólo los 13,6 millones de toneladas, el desplome en todos los negocios se estima que ronde el 75%. Además, la perspectiva para 2013 no es mejor, con una previsión de consumo de entre 10 y 11 millones de toneladas.

Por el contrario, el comportamiento de los costes de producción ha ido en línea ascendente. Baste destacar como ejemplo los costes regulados de la tarifa eléctrica, que han subido un 120% en los cinco últimos años.

Durante este periodo, la multinacional cementera ha hecho frente a la adversa coyuntura intentando adaptarse permanentemente a la realidad del mercado, pero todas las medidas llevadas a cabo se han revelado insuficientes ante la magnitud de la crisis.

Por esta razón, Cemex ha lanzado el Plan Horizonte, una nueva iniciativa basada en 7 líneas de actuación con el objetivo de asegurar el futuro de la empresa:

• Posicionamiento en los mercados más relevantes.
• Nuevo modelo operativo en las fábricas: se prevé mantener la operación integral en las plantas de Morata de Jalón (Zaragoza), Lloseta (Baleares) y Alicante. Operarán como molienda las instalaciones de Castillejo (Toledo), San Feliú (Barcelona) y Alcanar (Tarragona). La fábrica de Buñol (Valencia) operará de forma intermitente.
• Adaptación de plantilla.
• Políticas de ahorro y mejora de costes para ser más competitivos y fomentar la exportación.
• Concentración en el negocio: la asociación con un proveedor global de soporte de servicios en procesos administrativos permitirá a la compañía centrar sus esfuerzos en fabricar y comercializar sus productos y atender y satisfacer las necesidades de sus clientes.
• Apuesta por nuevos productos y soluciones constructivas.
• Mejoras productivas: producir con excelencia y competitividad seguirá siendo una de las prioridades de la empresa.