La planta que Cemex tiene en la localidad oscense de Monzón acogió el pasado 18 de abril una jornada dedicada a la seguridad. Durante el evento, con un marcado carácter formativo, se llevaron a cabo distintas actividades encaminadas a prevenir cualquier tipo de riesgo, tanto en las labores de producción y transporte como en los departamentos administrativos integrados en la compañía.
Entre otras actividades, se impartió un curso a todos los empleados en el que se reforzó el valor de la seguridad y salud en Cemex, uno de los elementos clave de la visión de la empresa. Se hizo hincapié en los comportamientos seguros y en lo importante que es “parar y pensar antes de actuar”. La seguridad y la salud es un valor prioritario, no solamente en el entorno laboral sino también en el ámbito personal y familiar.
Además del curso, durante la jornada se impartió formación específica sobre los trabajos en las diferentes áreas de la planta, ya sea en altura, con equipos eléctricos o con maquinaria pesada. A lo largo del día se programaron sesiones de primeros auxilios, video conferencias y simulacros de rescate sobre un silo de cemento y durante la limpieza de una cuba de hormigón. Para la realización de estas dos acciones, Cemex contó con la participación de la Brigada de Bomberos de la comarca del Cinca Medio, que también impartió un curso sobre extinción de incendios.
La política de seguridad de Cemex, el eje principal sobre el que pivota la filosofía de la empresa, se basa en desarrollar, implantar y compartir procedimientos que garanticen un alto nivel de seguridad y salud en el trabajo, así como en proporcionar formación e información a todos los trabajadores. Para Cemex, la prevención de riesgos laborales es responsabilidad de todos los estamentos de la empresa, pero además se busca integrar también a los clientes, proveedores y colaboradores.
El objetivo prioritario de Cemex es alcanzar los “Cero Accidentes”. Por eso, cada año se actualizan, revisan e incorporan nuevas medidas de seguridad a sus instalaciones como los controles de entrada para que todo el personal lleve los Equipos de Protección Individual (EPIs) adecuados, la mejora del taller de la planta o la introducción de un código de colores en los cascos para identificar a los equipos de emergencias y primeros auxilios, por citar algunos de los ejemplos más recientes.