El pasado sábado 23 de noviembre, cerca de 40 familias de empleados del Grupo Cementos Portland Valderrivas (GCPV) pudieron comprobar en primera persona la riqueza paisajística y natural que ofrece El Porcal, un enclave único, restaurado en su día por esta empresa en colaboración con la Asociación Naturista Naumanni, que se ha convertido en uno de los mejores humedales para aves acuáticas del Parque Regional del Sureste.
Guiados por los técnicos de Naumanni, las familias compartieron diferentes actividades como visualización de un video, avistamiento de aves, anillado y liberación de aves (p.ej. cigüeñas, mochuelos) y, para culminar la jornada, disfrutaron de un sencillo tentempié.
Las más de 400 hectáreas de lagunas situadas entre las estepas y humedales de los cursos bajos de los ríos Manzanares y Jarama que forman El Porcal, albergan 17 especies de mamíferos entre los que destacan el tejón y la nutria, carnívoros cada vez más escasos en la región de Madrid.
Conviven también 147 especies de aves de las que 15 se encuentran catalogadas en el Catálogo Regional de Especies Amenazadas. El pato colorado tiene aquí la única población reproductora de la Comunidad de Madrid, con más de 15 parejas. La garza imperial cuenta con la mayor colonia de cría de la región con más de 40 parejas. Otras especies interesantes son el bigotudo, pequeño pájaro de los carrizales o el aguilucho lagunero de los que apenas nidifican 40 parejas en toda la comunidad.
El Porcal también cuenta con 14 especies de anfibios y reptiles como el sapillo corredor o el galápago leproso, ambos protegidos, 6 especies de peces y una de insectos, el Plagionotus Marcorum, especie endémica de la Península Ibérica.
El Porcal, un ejemplo de restauración medioambiental
El Porcal fue hasta el año 2008 una explotación minera dedicada a la extracción de áridos. A principios de los años 70, cuando el boom de la construcción en España necesitaba cubrir su demanda de materiales, Aripresa, filial del Grupo Cementos Portland Valderrivas, dedicó una parte de las 433,75 hectáreas de la superficie de esta finca a la extracción de áridos silíceos.
A medida que la explotación avanzaba, un fenómeno se iba produciendo. La formación de 15 lagunas de diferentes tamaños y profundidades como resultado de la extracción por debajo del nivel freático. Lagunas que, GCPV con la colaboración de la Asociación Naturalista Naumanni, fueron remodelando a lo largo de los años mediante el relleno con materiales estériles, dándoles forma con orillas, entrantes y salientes y que han favorecido así la proliferación de la vegetación lagunar convirtiéndolo en un paraíso ideal para la fauna y la flora.
En sus aguas y carrizales se han identificado desde 1981 hasta hoy, un total de 184 especies de vertebrados de los que 120 crían o nidifican normalmente, 95 pasan el invierno y el resto son citas esporádicas, según los estudios realizados por la Asociación naturalista Naumanni y SEO/Birdlife.