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Cemex inaugura en Buñol el mayor horno de cemento blanco del mundo

La construcción del mayor horno de cemento blanco del mundo en la fábrica de Buñol ha supuesto una inversión de 50,5 millones de euros para Cemex. El nuevo horno se ha diseñado a partir de una línea de fabricación de clínker ya existente, que hasta ahora se encontraba parada. La capacidad de producción de esta instalación alcanzará las 600.000 toneladas anuales de un clínker, que, debido a la pureza y a las características de las calizas utilizadas como materia prima, garantizará al mercado un cemento blanco de altísima calidad. De esta forma, Buñol se convierte para Cemex en un punto neurálgico y de referencia mundial en la fabricación de este tipo de cemento.


La última tecnología aplicada en esta nueva línea también permitirá una mejora en la eficiencia energética de un 17% por cada tonelada de clínker producida, con la consiguiente disminución de las emisiones de CO2.


El nuevo horno tiene 62 metros de longitud por cuatro metros de diámetro y dispone de una torre de calcinación de 93 metros de altura que sirve para aumentar la temperatura de los materiales que se introducen en el horno, consiguiendo así reducir la factura energética al llegar los materiales previamente calentados. Entre otras partes de la instalación, destaca el recuperador de calor y el enfriador, que sólo se utiliza en España en las fábricas de cemento blanco de Cemex.


La planificación del proceso y de la torre de calcinación ha sido diseñada en su totalidad por Cemex y las labores de construcción, montaje y puesta en marcha han durado cerca de dos años, participando en ellas cerca de 1.500 trabajadores diferentes.



La fábrica


La planta de cemento de Buñol, creada en 1971, ha experimentado numerosas ampliaciones y mejoras, hasta convertirse en una de las instalaciones con la tecnología más puntera de la industria cementera española. Recientemente, Cemex ha finalizado la instalación de un nuevo filtro de mangas, que ha supuesto una inversión de tres millones de euros y garantiza niveles de emisión muy por debajo de los autorizados por la legislación vigente.


En la actualidad, la factoría dispone de dos líneas de producción en funcionamiento, una de cemento blanco y otra de gris. La capacidad de clínker gris es de 680.000 toneladas anuales, y la de blanco, con la puesta en marcha del nuevo horno, va a ser de 600.000 toneladas anuales.

noviembre 2007

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