El consumo de cemento en los ocho primeros meses del año ha sido de 7.397.362 toneladas, un 5,6% más que en el mismo periodo de 2014. Este porcentaje es tres puntos inferior al alcanzado al cierre del primer semestre, cuando el crecimiento era de un 8,6%. Esta moderación en la tendencia de crecimiento se debe al comportamiento de los dos últimos meses, julio y agosto, que suman conjuntamente una caída acumulada del 2% frente al mismo período de 2014.
En julio, el consumo cayó –por primera vez desde septiembre del pasado año– un 5,3%, un descenso que no logró compensar el ligero crecimiento, favorecido por el efecto calendario, de un 2,2% experimentado en agosto. El consumo de cemento en agosto se situó en 880.866 toneladas, 19.075 más que en el mismo período del año anterior. Por otra parte, en julio, el consumo alcanzó 1.063.274 toneladas, 59.708 menos que en el mismo mes de 2014.
“Tal y como venimos avanzando durante los últimos meses, el año 2015 va a ser un ejercicio atípico, marcado por una fuerte volatilidad, en el que veremos crecimientos y caídas; algo que están confirmando las últimas cifras registradas”, explica el director general de Oficemen, Aniceto Zaragoza.
Evolución del consumo de cemento en los ocho primeros meses del año
(años 2005-2015, toneladas)