Una de las parejas de halcón peregrino que nidificó en las cajas nido instaladas en lo alto del silo de Cementos Portland Valderrivas en el puerto de Tarragona ha criado con éxito cuatro pollos.

Los pollos de halcón peregrino ya han sido anillados para poder realizar un seguimiento y reconocerles cuando alcancen la edad adulta y vuelen por el puerto y la ciudad. Esta es la segunda vez, en los últimos diez años, que sale adelante una nueva generación de halcones peregrinos en el puerto de Tarragona, ya que el año pasado una pareja tuvo tres pollos.

El halcón peregrino se convirtió en una especie en peligro en muchas áreas del mundo debido al uso de pesticidas. Desde principios de los años 1970, las poblaciones se han ido recuperando gracias a la protección a gran escala de sus lugares de anidamiento.

El halcón peregrino alcanza la madurez sexual en un año y se empareja de por vida y puede anidar en pequeñas oquedades en el suelo, normalmente en bordes de acantilados o, como en el caso de esta pareja, en estructuras elevadas como el silo de Cementos Portland Valderrivas en el puerto de Tarragona.